Agujas en el aire

Shradha Kochhar es una artista textil mejor conocida por sus esculturas "khadi" hiladas en casa y tejidas a mano utilizando "algodón kala". Su trabajo se encuentra en una intersección entre la memoria material, los legados del algodón y la curación intergeneracional. Centrado en generar un archivo físico de narrativas personales y colectivas del sur de Asia, su arte se vincula al trabajo de las mujeres, el trabajo invisible y la pérdida. Su trabajo se ha expuesto en el Museo de Melbourne y en el Centro de Artesanía Contemporánea de Houston, entre otros, y aparece en el New York Times, British Vogue, Architectural Digest, Vogue, Harper's Bazaar y otros.

Alejandro Moreno Marín estudió diseño industrial y se especializó en fotografía en la Universidad Nacional de Colombia (2016). Ha editado libros, confeccionado ropa, diseñado objetos y pintado calles. Todo lo que ha ocupado su tiempo gira en torno a las posibilidades narrativas de la imagen y la exploración de medios y materiales. Ha participado en exposiciones colectivas en Bogotá y Londres (2016, 2019, 2020, 2021, 2023 y 2024) y en exposiciones individuales en Bogotá y Medellín (2023). Su obra fotográfica ha sido reseñada en publicaciones editoriales como el Photographic Museum of Humanity (2019), Revue 6 mois (Francia, 2021) y Yogurt Magazine (Italia, 2020, 2021).

Su quehacer artístico en la actualidad consiste en la creación de obras a partir de materiales textiles. Gracias a su trabajo en la edición de fotolibros, desarrolló un interés especial por las narrativas que se pueden construir mediante la interacción entre las imágenes y el material que las soporta. Aunque el proceso de conceptualización y los métodos de bocetación que emplea tienen mucho en común con prácticas artísticas tradicionales, como el dibujo o la pintura, el uso de técnicas como el bordado, el tejido y el patchwork implica posibilidades específicas determinadas por el material. Transitar de las fibras del papel a las fibras del textil significa estar dispuesto a la sorpresa, ya que la naturaleza misma de los textiles condiciona y determina las características de la imagen.
Su obra se nutre de su experiencia sensible; no busca acontecimientos o asuntos sobresalientes, sino más bien indagar sobre lo extraordinario de lo cotidiano.

Entre los temas que le interesan se encuentran la iconografía religiosa, la cultura material y la producción gráfica popular. Encuentra en los materiales y técnicas de uso cotidiano un importante insumo para la creación de sus obras, buscando resignificar su valor artístico y proponer nuevas formas de aplicación e interacción con ellos. Al emplear técnicas tradicionalmente asociadas con el hogar, como el bordado y el tejido, pretende expandir las narrativas convencionales sobre estos métodos.

Puntada Bastarda es el proyecto en el que Elena Rodríguez une sus dos pasiones, el bordado y la música. Al inicio de su andadura en el sector de las artes gráficas, su carrera estuvo ligada a diversos proyectos dentro de la escena musical bizkaína. Con este proyecto, Elena consigue transmitir, puntada a puntada, la pasión por los discos que han marcado su vida y con los que tanto disfruta. En la actualidad participa en distintos proyectos organizados por Bokashi.